El tiempo que un inmigrante puede ser detenido depende de varios factores, incluyendo el motivo de la detención y la duración del proceso de inmigración. En general, el Servicio de Inmigración tiene autoridad para detener a personas en espera de una audiencia de inmigración o deportación por un período de tiempo limitado.
Si el caso de inmigración se resuelve rápidamente, la detención puede durar unos pocos días o semanas. Si el caso es más complicado o si hay demoras en el proceso, la detención puede durar varios meses.